Esta tarde en la esquina de Darragueira y San Martín, el grupo conformado por cinco mujeres concientizadoras de las normas de transito, dirigidas por el Sr. Marcelo Herrera junto al Inspector Eduardo Tapia, dependientes de la dirección de inspección general a cargo de la Dra. Cecilia Etcheverry, volvieron a realizar un operativo conciencia, el mismo consiste en detener a los motociclistas en infracción y sugerirles que respeten las normas de transito, destacando la obligatoriedad del uso del casco y se le hace entrega de un folleto informativo.
La mayoría de la gente se detiene y se retira muy conformes por la manera en que son tratados, reconociendo que están en falta.
La amabilidad y el respeto por el infractor se destacan en este grupo llamado “Guardia Urbana”, que está a modo de prueba y no tiene poder de policía.
Su presencia, solo su presencia ha logrado que muchos que habían guardado el casco en algún rincón de la casa lo vuelvan a usar.
La etapa Scarfoni, fue efectiva pero la metodología fue de castigo al infractor, haciendo cumplir la ley a rajatablas, colmando el Juzgado de faltas de actas de infracción, muchas de ellas discutibles y llenando el depósito municipal de motos. Con el correr del tiempo la efectividad elogiada por todos, incluidos nosotros, provocó excesos de poder y un enfrentamiento con parte de la sociedad, finalizando con la muerte de dos jóvenes y el incendio de varios edificios públicos, entre ellos el municipio.
Hoy para muchos este plan de concientización con presencia de “Inspectoras” en la calle puede parecer tibio, aunque sin labrar infracciones ya han logrado un mínimo pero positivo cambio.
Castigo o concientización, ¿cuál es la mejor metodología para mejorar el transito y prevenir accidentes?, una ya la conocemos la otra recién comienza.
Todos debemos colaborar para el éxito de este plan, pues en definitiva tiene un solo objetivo: CUIDARTE.
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