Rivadavia recibía a independiente de Mones Cazón, Pehuajo, en el Carlos Asali, por el partido de ida de la tercera ronda del Argentino C. Poco se sabía de este equipo que había llegado a esta tercera ronda al clasificar por penales frente a 9 de Julio de Chacabuco. El Fortín con una sola baja, la de Bruno Díaz con quien ya no podrá contar por el resto del torneo. En el Arco Esteban Pontalti, Facu Roldán, Pablo Bento, Miguel Manicler, Rody Aldaz, Mario Reduto, el ”Viejo” Fretes, Ale Biaín y Martín Ríos, Alexis Delluca y Willi Vázquez. Al final entraron Gómez, Bechtold y Acosta.
El partido comenzó parejo, al principio le costó a Rivadavia tomar las marcas y acomodarse en defensa, en ese período abrió el marcador la gente de Independiente, con una buena jugada y ponía las cosas 1 a 0 para la visita. El Fortín buscaba pero no encontraba el rumbo, no llegaba claro. Martín Ríos no podía marcar la diferencia ya que el técnico Bergiano de Independiente, mando al N º 4 Pagano para que lo siguiera por toda la cancha y si era necesario afuera también.
En el segundo tiempo al minuto de juego nada más, se le fue al diablo el libreto al técnico visitante ya que luego de un centro al área, Martín Ríos se eleva, y de cabeza, a lo Palermo, marca el empate en uno. Y decimos que se le escapo la “Tortuga”, no , no Manuelita, no, porque Martín Ríos en el salto le saco cuatro cabezas al Nº 4 que por más que quiso no llego.
Era empate, y los minutos pasaban, sin embargo Rivadavia estaba mejor, era más filoso, pero los goles no venían y ya sus simpatizantes se empezaban a preguntar, ¿che será buen resultado el empate para ir de visitante? Alguien que estaba en la zona de vestuario, importante figura de nuestra ciudad, de nombre Aldo, dijo este partido termina 3 a 1. Yo miré el reloj y faltaban cinco minutos, por un momento pensé, ni loco!!, al mismo tiempo que Willi Vázquez clavó un cabezazo al ángulo y las tribunas se caían, todos se abrazaban, sacaron del medio la agarró Mario Reduto, dejó el tendal, paso a todos, y cuando parecía que se lo perdía puso el tercero y ni le cuento lo que se vivió en el Asali. El Jefe se pegaba en el pecho, como diciendo “yo les dije”, el Presidente perdía gorra, anteojos, los periodistas invadían el campo de juego, todos se abrazaban, era el 3 a 1 , importante diferencia para viajar hasta Pehuajó la semana que viene. luego vino el final y ahí el festejo fue mesurado, se sabe que quedan 90 minutos, que todavía falta mucho, que Rivadavia se agrande en las difíciles y tiene jugadores distintos, los Tiene a Ríos que se banco la pegajosa y molesta marca personal, sin chistar y cuando pudo zafar metió el empate.
Momentos de tensión
Dos momentos fueron complicados en el partido, el primero fue cuando terminó el primer tiempo, los jugadores se dirigían al vestuario, cuando el Nº 4, marca personal de Martín Ríos se metió en el vestuario del Fortín ya que la premisa era no dejarlo ni un minuto solo!!!!!! Jjjaa
El otro momento duro que tuvo que pasar Martín Ríos, fue al final del partido , cuando luego de bañarse, cambiarse, con el cansancio lógico del partido, noto que el bolso pesaba más de los normal, ¿saben porque? Porque adentro estaba el N 4 !!!!!!!
Más allá de las bromas el planteo del técnico visitante es entendible, prefirió anular un jugador propio para tratar de anular al que él consideraba vital para el Fortín y lo logró en gran parte del partido, también hay que destacar la actitud de Martín ya que en ningún momento perdió los estribos y nunca reaccionó.
«El Fortín de los Milagros» porque cuanto más fea está la cosa, mas fuerza tiene para sobreponerse, por aquella Historia ante estrada, y por esta remontada final!!
Quedan 90 minutos de juego, será de visitante, en Pehuajo, el próximo domingo, en tierras de Manuelita
Comentarios de Facebook