Murió esta madrugada, a los 84 años. Con su banda mató a tres empresarios.
Después de haber sufrido un accidente cerebrovascular que lo tuvo un mes internado, hoy murió Arquímedes Puccio, el hombre que lideró una banda de secuestradores que mató a tres empresarios. Puccio tenía 84 años y murió esta madrugada en su casa en la ciudad de General Pico, provincia de La Pampa, donde estaba radicado.
Arquímedes Puccio había estado internado en el Hospital Gobernador Centeno, un centro asistencial público de la ciudad de General Pico, hasta fines de marzo, pero la muerte ocurrió en su casa del barrio El Molino, según informaron medios periodísticos de esa provincia.
Puccio era abogado y fue el jefe de una banda, que también integraban sus hijos Daniel y Alejandro, junto con otras personas. El grupo había montado en su casa de San Isidro, en el Gran Buenos Aires, una especie de cárcel que usaba para mantener secuestradas a sus víctimas.
Fueron descubiertos cuando en una investigación, la Policía encontró y rescató a Nélida Bollini de Prado, una mujer que había sido secuestrada en julio de 1985 y estaba prisionera en el sótano de esa casa.
Pero la banda, según comprobó después la Justicia, también había participado en los secuestros extorsivos que terminaron con la muerte de los empresarios Ricardo Manoukian (en julio de 1982), Eduardo Aulet (en mayo de 1983) y Emilio Naum (en junio de 1984). Este último no llegó a ser secuestrado ya que lo mataron cuando quiso evitar que se lo llevaran. Lo ejecutaron porque había reconocido a quienes quería secuestrarlo.
Por todos estos casos, los Puccio fueron condenados a reclusión perpetua. Arquímedes Puccio estuvo 23 años preso, ya que fue condenado en 1995. En una primera etapa cumplía su condena con prisión domiciliario. Pero como violó las normas de esa situación, en 2004 se le revocó el beneficio y fue trasladado a un instituto de régimen abierto justamente en General Pico. Actualmente se encontraba en libertad condicional, que le había sido otorgada en 2007.
El hombre, quien siempre negó que tanto él como sus hijos hubieran tenido participación en los delitos por los que los condenaron, se había recibido de abogado y también se había integrado a un culto evangélico
Clarín.com
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