Hace unos meses, BTI publicó una nota en la que se reflejaba la labor de los alumnos de la escuela secundaria que funciona en el edificio de la Escuela Nº 7 «Juan B. Alberdi».
Esos jóvenes pensaron en una manera de combatir la constante agresión que sufrían las paredes de la escuela y decidieron pintar coloridos murales surgidos de sus manos y, especialmente, de su voluntad.
Pasaron, como fue dicho, algunas semanas y los murales están tan coloridos y limpios como en un principio y cumpliendo su cometido: protegiendo y embelleciendo las paredes y alegrando la vista del que observa.
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