«Estoy tratando de ser una buena zapatera»

Natalia Valenti es baraderense, pero como muchos jóvenes nacidos en nuestra ciudad, está radicada desde hace varios años en Capital Federal, específicamente en el barrio de San Telmo.

Casualidad o no, este barrio se asemeja mucho a ella en cuanto a sus gustos y la profesión que eligió desde chica, diseñar y confeccionar zapatos.

Lo que durante años fue un oficio hoy manteniendo la esencia se fue transformando en un trabajo muy vinculado a la moda, donde se necesita conocimiento, creatividad, paciencia y buen gusto.

«Me encantan los zapatos, desde chica es lo primero que le veo a la gente, siempre, lo primero que veo en una persona es que esta calzando. Fui creciendo comprando zapatos, zapatos usados, en ferias o donde fuese aunque sea para verlos o tenerlos y quizás nunca me los ponía»

Así nos contaba Nati como nació su vocación por una actividad artesanal no muy conocida y de la cual aun no existe una carrera especifica; «No sabía que se estudiaba zapatos, conocía que en la UBA en Diseño se veía zapatos pero casi nada, así que me puse a investigar y en Bs As había unos cursos que daban de diseño de calzado, y así empecé en el 2012»

Además del estudio y el diseño, Natalia destaca que sobre la confección de calzados aprendió mucho gracias a un zapatero de oficio; «Estuve más de un año practicando y haciendo diferentes cursos, porque es muy rudimentario lo que hay acá para lo que es diseño del calzado, te enseñan, pero más aprendí cuando arranque con mi zapatero, un zapatero de oficio, que era el que me cosía, el que me ayudaba. Con el aprendí mucho más sobre lo que es zapatos en general porque es complicado, tiene varios procesos, más que a mí me gusta lo artesanal, no la producción masiva entonces es más complicado estudiarlo».

Con pocas palabras, Natalia Valenti nos explica cómo se hace un zapato, algo que para ella es común, pero que evidentemente requiere de talento y destreza para concretarlo; «Tenes que tener las hormas para los diferentes pies, yo apunto a un zapato a medida, entonces tenes que tomar las medidas del pie, ver la horma, si no es la horma modificarla, se le coloca corcho y se va modificando según las características de cada pie, si tiene el empeine alto o un juanete al costado. A partir de ahí se hace el diseño del zapato sobre la misma horma, se encinta y se dibuja o lo pasas a plano y lo dibujas a plano, después se recortas todos los moldes. Se hace la moldería del propio corte de zapato y también del forro, después a coser y armar el zapato en la horma que es lo más complejo. Con respecto a los tacos depende de lo que quieran porque según el ancho del pie se consiguen tacos y si no hay que fabricarlos».

El calzado artesanal, de diseño o a medida, como mas les guste llamarlo demanda tiempo y además se paga la creación, pues ese par de zapatos generalmente es único; «La creación y fabricación de un par de zapatos me lleva unas dos semanas aproximadamente, porque yo todavía no vivo solo de esto. De las 7 a las 12 hs hago zapatería todos los días en el taller y el resto de la jornada trabajo en otras cosas».

Nuestra artista nos cuenta de qué manera se hacen los zapatos en serie y con diferentes tamaños, algo que a ella no le gusta para nada; «En general se maneja de otra manera, se hace el diseño y se manda a escalar el corte que hiciste, es decir el molde y se manda al zapatero, la mayoría de mis compañeras que estudiaron conmigo hace eso, se maneja así. Tu diseño va a unos talleres que te hacen todo el zapato. Yo lo hago artesanal, es decir hago todo el zapato, me compre las maquinas y arme el taller, es una casa taller ubicada en el barrio de San Telmo».

Cuando pensamos en zapatos generalmente los imaginamos de cuero, pero los calzados se pueden hacer de una gran variedad de materiales; «Cualquier material se puede utilizar para el zapato, lo que hay que encontrar es el espesor para que el zapato no se deforme, entonces si lo haces con telas buscar otras entre telas para colocar entre medio en los forros, se va viendo el espesor. Es como todo cuando uno agarra la cancha haces cualquier cosa».

El calzado además de ser parte de la vestimenta de las personas, requiere que el zapatero conozca cómo se mueve el pie al caminar. Es por eso que muchas veces cuando adquirimos zapatos en serie nos encontramos que no nos son cómodos y hasta nos traen problemas. Natalia da un claro ejemplo sobre esto al hablarnos de las sandalias que hoy por hoy usan muchas mujeres; «La típicas sandalias cruzadas que se usan ahora, que tienen dos tiras cruzadas adelante y las usamos todas las mujeres, tenes que saber muy bien por donde tiene que pasar el pie porque si no te lastima porque el pie justo en el centro hace fuerza cuando uno camina y si hacemos una encuesta el 85% de las que las usan tienen una ampolla ahí arriba. Es decir que las tiras tienen que pasar por determinados lugares del pie, no se puede poner en cualquier lado porque el pie tiene una morfología que hay lugares donde hace más fuerza, otras que no. No se pueden poner tiras en cualquier lado tienen que estar bien establecidos».

Siguiendo con la charla y recorriendo un supuesto zapato, llegamos a los tacos y Nati nos dice que el mejor taco es el «taco chino»; «Todo zapato tiene que tener un taco, el mejor taco, es el taco chino es el que mejor balancea el pie, de ahí tres centímetros, cuatro centímetros de taco un zapato tiene que tener, el pie necesita un desnivel ya sea para el arco, para que apoye bien, las chatitas que van planas al piso no son buenas».

Porque la moda impone, hoy es muy común ver a las chicas andar sobre unos zapatos con plataformas que al caminar uno nota que van incomodas; «Con respecto a los zapatos con plataformas que hoy usan las chicas, las plataformas no son malas el tema es que tienen que tener un desnivel porque sino no articula el pie y van tipo una tabla, el pie no hace el trabajo que necesita hacer al caminar».

Sin taco o con taco alto, como todo los extremos no son buenos; «Tampoco es bueno el taco de 10 cm, en realidad el taco no tiene que superar los 7 cm. Porque no le hace bien ni al pie ni a la pierna, el caminar con esos tacos después repercute en la rodilla, en la cadera, va subiendo, calcula que el pie es nuestra base y es chiquita».

¿Que buscan las mujeres mayor comodidad, elegancia o moda?

«Y más o menos, volvemos a las sandalias con las dos tiritas yo no puedo creer que se pongan eso y que sufran, tengo amigas incluso que les digo no te pongas eso por favor, andan con el pie lleno de curitas y las siguen usando, es decir que la moda tira mucho todavía».

Nuestra zapatera artesanal de diseños exclusivos, quien a pesar de no especializarse en los zapatos de hombres le ha hecho varios pares a Peteco Carabajal, quiere seguir creciendo en esta profesión y sueña con algún día poder dedicarse exclusivamente a esta actividad que hoy conocimos un poquito más; «Yo hago variedad en zapatos para mujeres, de hombre he hecho poco, ahora la idea es poder hacer un curso en Italia, porque quiero hacer cosido de la suela a mano, ya estuve trabajando con un zapatero chileno en eso y me hice los primeros zapatos, para mí por supuesto, son como los zapatos de hombres de antes que se cosía la suela y la vira. Quiero ver y aprender como es el diseño de un zapato así que acá en Argentina todavía no se estudia».

Qué bueno es a veces poder despegar del diario acontecer baraderense y poder mirar un poco mas allá, conociendo a gente como Natalia Valenti, quien con mucha convicción y trabajo se aferró a su vocación y hoy, aunque ella no lo diga, ser una artista del diseño y confección de zapatos exclusivos.