Una vecina, que prefirió preservar su identidad por seguridad, habló con BTI y nos relató el mal momento que vivió en miércoles por la tarde cuando una moto con dos jóvenes la siguieron desde que salió de su casa.
La Señora, caminaba por Oroa hasta la iglesia ubicada en calle Thames al 1000, los sospechosos la miraban, tomaron la calle en contramano y pasaban cerca de ella por la vereda mirándola y riéndose. Ella sostiene que no le arrebataron sus cosas porque venía un señor detrás y una planta los obligó a detenerse.
Incluso cuenta como estaban vestidos y dice que llegó a la iglesia temblando de miedo;
“Yo salía para la capilla ubicada en Thames entre Malabia y Oro, resulta que cuando salí de casa pasaban dos muchachones en una moto y era continuamente observada, yo llevaba la cartera, llevaba un bolso, una manta y me siguieron hasta la esquina de Santa María de Oro, entonces me quede parada ahí a ver qué hacían, siguieron hasta la escuela Nº 4, de ahí doblaron por Mariano Moreno y después pasaron volando por la esquina donde estaba parada- dieron la vuelta a manzana agarraron por Malabia y en contramano se metieron en Thames.
Yo continúe mi camino y a la mitad de cuadra hay un jazmín demasiado grande que es peligroso, pero atrás mío venia un señor, entonces me anime y seguí y estos tipos doblaron arriba de la vereda hasta ese jazmín que está a mitad de cuadra- siempre por Santa María de Oro, se bajaron porque no podían pasar con la moto- porque si no se me venían encima- y me alcanzaron a ver y me miraron pero bien mirado y entonces me dio un poco de miedo y agarre y seguí, después cuando yo llego a la capilla llame a mi sobrino para que me acompañara porque tenía miedo porque me habían visto salir de mi casa. Y gracias a Dios no me paso nada, pero el susto que me pegue, hay que tener cuidado cuando uno sale.
Eran dos personas- dos muchachos jóvenes- uno tenía un pulóver rayado y después cuando llego a la capilla me dice una señora que vive cerca del FONAVI, esos que te siguieron son del barrio, tené cuidado porque la mamá los manda a robar, claro estos muchachos cuando me vieron salir imagínese con bolso, la cartera y que se yo, me persiguieron y lo que me salvo es la planta esa de jazmín que no podían pasar con la moto sino me quitan las cosas que llevaba. El momento que pasé- llegue temblando -, hay que tener mucho cuidado hoy, hay que salir acompañado, gracias a Dios no me pasó nada y eran recién seis y media de la tarde.”
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