Una cuadra quedó incompleta y mientras las otras aguardan que llegue la mejora prometida y adjudicada. Los vecinos ven que las máquinas regresan pero al poco tiempo se van sin terminar.
Avanza y se frena. Se reactiva y se vuelve a detener. Las máquinas copan las calles del barrio y de un día al otro no queda ninguna. Los vecinos se entusiasman y se molestan. Con esos vaivenes se viene realizando la obra Barrio Bernabé que, como sabemos, abarca no solo al mencionado barrio sino que incluye a todo el sector comprendido entre Antártida Argentina, Paso, Teófilo Rosell y Colombres-Bernabé de San Martín.
Una de las mejoras es la pavimentación de las calles Santa María de Oro y Malabia, en su totalidad. Por ahora solo empezaron con Oro. El año pasado, a las apuradas y hasta de noche, pavimentaron una cuadra, la del Polideportivo; fue antes de las elecciones. Luego se frenó. Este año volvieron a pavimentar la misma cuadra porque la tarea inicial estuvo mal hecha. Se frenó. Y recientemente el pavimento avanzó. Pero la alegría de los vecinos fue efímera.
En cuanto a la calle Malabia retomaron con la obra de construcción de cordón cuneta, una tarea necesaria para luego asfaltar. Aún no está terminada. También avanzaron, a medias, con los cordones cuneta de las calles transversales como Jorge Newbery, Martín Fierro, Santos Vega y Segundo Sombra.
La Plaza de los Intendentes también estuvo paralizada. Quitaron los bancos de cemento, los pintaron y los dejaron a la intemperie. Mejoraron las veredas internas (que ya estaban construidas) y retomaron con la construcción de nuevas veredas. Retiraron los juegos infantiles que estaban totalmente dañados.
E iniciaron con el recambio de las luminarias con la colocación de nuevos postes de luz led que deben ser instalados en toda la cuadrícula que comprende la obra.
Otras obras paralizadas
El bulevar René Simón corre con igual fortuna que Santa María de Oro. Llega el pavimento, avanza una cuadra y se frena por completo. Entre la falta de material asfáltico y la falta de pago a las empresas, las obras no avanzan según los plazos previstos.
Y también empieza a quedar casi en el olvido la mejora central de la calle Anchorena, donde “lo nuevo” ya empezó a deteriorarse.
Publicado por La Opinión Semanario (Edición del 02/03/18)
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