Desde la madrugada del sábado, Chile está viviendo una pesadilla histórica, tras el terremoto que provocó muertos, desaparecidos y destrucción.
El baraderense Carlos “Cachi” Bechthold, eligió Chile como país adoptivo, en donde desarrollo su carrera como futbolista profesional y actualmente está dirigiendo una escuela de futbol, es casado con María de los Ángeles Chervaz, también de Baradero y tiene tres hijos.
Desde hace se encuentra viviendo en Curicó, perteneciente a la séptima región y fue uno de los lugares mas afectados por el movimiento telúrico.
En dialogo con él, nos contaba que los ha sorprendido mucho ya que el sismo tuvo lugar en horas de la madrugada y todos se encontraban durmiendo. Sintieron en principio un temblor en la tierra pero pensando que iba a calmarse, no se alertaron. “Luego se calma, se movía de a poquito, pero después tuvimos un movimiento muy fuerte y yo dije <Ya, bajemos, bajemos> y salimos todos para abajo con lo puesto”, narraba.
Dando un poco de tranquilidad a todos sus conocidos y familiares, Cachi nos contaba que se encuentra junto a su familia en un lugar donde hay construcciones nuevas, las casas son antisísmicas por lo que éstas han resistido al fenómeno ocurrido el pasado viernes.
“En el sector que estoy yo afortunadamente hemos salido ilesos. Pero después el casco de la ciudad ha sufrido daños gravísimos. Prácticamente el 60 o 70% de la ciudad está en el suelo… Porque es como que en Baradero hubiese habido un terremoto de tal magnitud y por ejemplo, se vienen abajo las construcciones más antiguas. Por ejemplo se me viene a la memoria, el teatro Colón, el museo, la Iglesia…”, indicó.
“Acá hemos tenido que lamentar varios muertos, entre ellos una familia argentina, la cual si bien no conocíamos muy bien sabíamos que ellos estaban en el centro… Gente conocida que se le cayó la casa, o están desaparecidos”, expresó.
La cifras de muertos ya superan el número de 800, y hay un importante números de desaparecidos. “Además del terremoto, fue muy fuerte el tsunami o maremoto, el agua en la zona costera ingreso varios kilómetros y arrasó con todo, era fin de semana y acá mucha gente aprovecha para ir al mar, hay muchos desaparecidos y ahora empezó a escasear la comida, casi no dormimos porque las replicas son muchísimas y tenemos miedo que se repita, fue el más fuerte de la historia de Chile”.
Las radios de la ciudad cumplieron un papel fundamental, fueron el único medio de comunicación dentro de todo el caos, se unieron todas las emisoras y empezaron a transmitir a los pocos minutos del terremoto, aun hoy constantemente organizan campañas de búsqueda. Sinceramente fue una experiencia terrible, inolvidable. Gracias a Dios salimos ilesos, sanos y salvos… Creo yo que no me lo voy a olvidar por el resto de mi vida…lloramos mucho jamás imaginamos vivir algo así”, expresó.
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