La Selección Argentina empató 2-2 en el debut de la Copa América de Chile, en el Estadio La Portada, en La Serena.
El quipo conducido por Gerardo Martino mostró dos caras distintas en los 90 minutos, con un buen primer tiempo y un segundo muy flojo, que le permitió reaccionar a los paraguayos y sobre el final conseguir un valioso empate.
Argentina tuvo el control de la pelota durante toda la primera parte, con varias llegadas al arco rival aunque con poca claridad a la hora de definir, ante un equipo que se retrasó demasiado e impedía la apertura del marcador.
Después de varios intentos, el gol llegó a los 28 minutos, luego de un error del defensor Miguel Samudio, que quiso tocar para su arquero, pero el Kun Agüero interceptó y definió ante el uno, para marcar el primero del partido.
Cinco minutos más tarde, con un penal inventado sobre Di María, Messi marcó el segundo. Con este resultado y por cómo se desarrollaba el juego parecía que Argentina iba a conseguir una victoria por goleada.
Pero el complemento fue todo lo contrario. Paraguay salió a atacar y a los 15 minutos consiguió el descuento con un golazo de Haedo Valdez. El partido se hizo de ida y vuelta; Argentina tuvo chances de ampliar la ventaja pero también sufrió con las llegadas claras de los dirigidos por Ramón Díaz, que permitió hacer figura a Sergio Romero con dos atajadas claves.
Martino buscó más poder ofensivo con los ingresos de Tevez e Higuaín por Pastore y Agüero. El mediocampo quedó desprotegido y Paraguay tuvo más libertad para seguir avanzando en el campo. Cuando parecía que la albiceleste se quedaba con la victoria, a dos minutos del final, luego de un tiro libre, Lucas Barrios consiguió la igualdad y un punto más que valioso.
Para la selección fue un debut con sabor a derrota, por cómo se dio el trámite del partido. Ahora queda recuperarse para enfrentar el martes a Uruguay, que viene de vencer a Jamaica en el primer partido por 1-0.
María Luz Fucci
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