El expresidente de Brasil Lula da Silva está pasando por un momento personal muy difícil. Uno de sus nietos murió a los siete años a causa de una meningitis y la Justicia aceptó un pedido de su defensa para que deje en forma momentánea la cárcel en la que está detenido y pueda asistir al funeral.
Los abogados de Lula presentaron un recurso para que su cliente, quien está preso bajo condena por un caso de corrupción, pueda despedir a su nieto Athur Araujo Lula da Silva. La jueza Carolina Lebos le dio la autorización.
El nene, hijo de Sandro Luis Lula da Silva y Marlene, murió en el hospital de Batira de San Pablo debido a una meningitis causada por una bacteria que se le alojó en las membranas entre el cerebro y la médula espinal, precisó la agencia EFE.
Hace poco más de un mes Lula recibió en prisión la triste noticia de otra muerte dentro de su familia, la de su hermano mayor, Genival Inácio da Silva, conocido como Vavá.
En ese momento no llegó a conseguir la autorización para ir a la ceremonia de despedida, aunque llegó recibir la aceptación para que vaya a asistir a la reunión familiar que hicieron luego del entierro. El ex mandatario, finalmente, se quedó en la cárcel.
Lula está detenido desde abril de 2018 en la sede de la Policía Federal de Curitiba. La Justicia lo condenó a 12 años de prisión por los delitos de «corrupción pasiva» y «lavado de dinero».
tn.com.ar
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