La modelo y conductora, esposa de Darío Cvitanich, se refirió a las dificultades de viajar tanto, cambiar de casa y estar full time para los chicos como algunas de las “penurias” que pasan las esposas de los deportistas
A sus 31 años, «Chechu» Bonelli es madre de Lupe y Carmela, fruto de su relación con Darío Cvitanich. Luiego de una exitosa carrera en los medios como modelo y conductora ha decidido ocuparse de la crianza de sus chicas y acompañar a su marido que hoy juega en el Miami FC de Estados Unidos.
¿Cómo es la vida de una botinera? «Coincido con Wanda Nara. Leí su carta y se me puso la piel de gallina. Me sentí identificada a pesar de no coincidir en muchas cosas con ella. Nadie va a entender la vida de la mujer de un futbolista si no la vive», dijo en diálogo con el ciclo radial Espiando la Noche por RadioLK sobre el texto que publicó días atrás la esposa de Mauro Icardi alegando las dificultades de ser la esposa de un futbolista argentino en el extranjero.
«Yo deje todo por mi marido en mi mejor momento», dijo «Chechu» y agregó que «el trabajo de madre cansa más que cualquier otro». «A veces paro la pelota, miro y digo: ‘Quiero volver a ser soltera, tener 21 años, no tener horarios’. Pero son pocos los días. Charlo con Darío a veces y le pregunto: ‘¿No te pasa?’ Y me dice que no», comentó después entre risas.
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Mientras muchos creen que la vida de una botinera es lujo y relax, la modelo contó el lado B: «Mi vida es vivir arriba de un avión, fines de semana sin tu marido, sola con hijos, cambiar de casa, de colegio… No hay nada más lindo que volver a tu casa, a tu cama, y hace cinco años que vengo cambiando todo. Las decisiones de donde ir a vivir se toman en familia. En un momento hubo una posibilidad de ir a Arabia y le dije que no».
La casa propia también parece un espejismo: «Cada vez que nos mudamos, cambiamos los muebles. Al principio me interesaba decorar mi casa, ahora con tanta mudanza ya me agoto».
«Ya le dije a mi marido que mi venganza va a ser que cuando volvamos al país, él va a hacer de padre y madre, y me va a tener que bancar (…) Vine a Buenos Aires para hacer la visa de trabajo. Mi idea es trabajar en la tele de Estados Unidos, así facturo y paro de gastar un poco», dijo desdramatizando el tema.
Por último se refirió al episodio que la tuvo en boca de todos el martes pasado cuando aparecieron unos chats en que el periodista deportivo Maximiliano Fourcade la mencionaba para intentar conquistar a una chica.
«No conozco a Fourcade. Lo único que le agradezco, es que después de tanto tiempo, volví a ser TT», ironizó la modelo y concluyó: «Me entere del tema por Darío, que me explicó lo que paso. Me reí mucho con los chistes que salieron del tema».
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