Durante toda la jornada hubo expresiones de repudio por la muerte de Lucas Rotela asesinado hoy por el oficial de policía Gonzalo Kapp.
Primero fue la comisaria, donde un grupo de amigos y familiares expresaron su bronca arrojando piedras y gritando asesinos.
Luego a medida que corrían las horas y la noticia tomaba estado público un grupo de aproximadamente 300 personas se congregó frente a la municipalidad para repudiar lo ocurrido, se están quemando cubiertas, colocaron carteles, piden entre aplausos y gritos; justicia y la renuncia del intendente.
Los policías pertenecientes al Grupo de Apoyo Departamental (GAD), observan desde distintas posiciones el accionar de la gente pero sin intervenir.
La protesta se hace en forma pacífica.
A la medianoche se espera la llegada del cuerpo de Lucas desde San Nicolás donde se le efectuó la autopsia por pedido de la familia porque según manifestaron “en Baradero no hay garantías”.
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