El intendente Coronel se casó con su «Barbie» y tiró la casa por la ventana
Las fotos y los detalles de la boda que dio que hablar en General Rodríguez, entre el jefe comunal y la hija del comisario.
Finalmente, el de Coronel y la «Barbie» Georgina Tedesco, no fue un romance fugaz. El pasado 13 de febrero el intendente de General Rodríguez dio el sí en el Registro Civil.
Los novios emitieron más de 300 misivas con las que invitaron a sus familias y allegados a celebrar su unión. El lugar elegido por Marcelo Coronel y su futura esposa fue el Palacio Leloir, un salón ubicado en la calle Manuel Gómez Carrillo 3861, en Parque Leloir, partido de Ituzaingó.
Es la segunda vez que Marcelo Coronel pasa por este trámite, ya que, en 1998 se divorció de Patricia Noemí Martínez, su primera mujer y madre de sus hijos. Años más tarde, mantuvo una extensa relación con Adelma Arguissain, con quien convivió hasta los últimos meses de 2009 cuando fue desplazada del corazón del funcionario por la Barbie.
Según publica el diario El Vecinal, los presentes en la fiesta reconocieron: “Nunca había participado de un casamiento de éstas características, con tanto lujo y un plantel gigante de personas a su disposición”.
Con 48 años, Coronel se ganó el cariño de una de las bellezas del pueblo conocida por haberse calzado, a los 18 años, la corona de reina de la Fiesta de la Industria local. Georgina Pamela Cancela Tedesco tiene 24 años y es la hija del comisario Julio Barragán.
Llama la atención que el intendente haya elegido adelantar su casamiento, teniendo en cuenta el mal momento político que está atravesando, pero sus opositores creen que, en realidad, se trataría de una maniobra destinada a dilatar su ida del Palacio municipal, ya que, se tomaría licencia correspondiente.
Quienes abonan esta hipótesis, creen que se trata de una estrategia del abogado de Coronel, Dr. Luis Rapazzo, para que su cliente continúe al mando del municipio el mayor tiempo posible.
Palacio Leloir cuenta con una capacidad para 350 personas, piscina, un «enorme parque iluminado» y es uno de los más elegantes de la zona oeste. Allí llegaron los novios, sonrientes y despreocupados por lo que les depare el porvenir.
Detalles de la fiesta
Los periódicos locales describieron las escenas de la “romántica” noche. La velada comenzó cerca de las 20:45, hora en que el padre Eduardo bendijo los anillos de la pareja.
Georgina, acompañada por su padrino, se dirigió a la pérgola en una carroza tirada a caballos. Marcelo, por su parte, ingresó al lugar con su madre, y esperó, emocionado, a su ahora mujer.
Luego de esta ceremonia introductoria, todos (los protagonistas y los invitados), pasaron a uno de los salones para disfrutar de un banquete más que apetitoso: “barras se servían desde gaseosas hasta los más sofisticados tragos, complementado con una recepción compuesta por una gran variedad de quesos, mariscos, frutos de mar, fiambres de los más variados en lo frío y desde cazuelas de mariscos, fideos negros con salsa de camarones, salmón grille y mollejas al verdeo que eran servidos en el majestuoso parque de la casa como el complemento de los platillos calientes”, publica El Vecinal.
En el salón principal se distribuyeron unas 26 mesas de 8 personas cada una. Los novios saludaron desde un balcón y se entregaron a los compases del vals, en el centro de la pista de baile. Sobre ellos, unas 20 pelotas giratorias y una gigante en el centro.
Al rato, la música se apagó y los comensales se acomodaron en sus sillas. Hora de la cena. El menú de entrada: “involtini rellenos”, al que le siguió como plato principal “lomo salceado con mil hojas de papa» y «carré de cerdo a la mostaza con budín de choclo y puré de batata». Un festejo, sin dudas a todo trapo.
A esto le siguieron las tradicionales tandas de bailes, entre bebidas y tragos, hasta llegar al infaltable carnaval carioca. Luego, cerca de las 5, Marcelo y su “princesa” cortaron la torta, luego se abrió la mesa de dulces, y transcurridas unas pocas horas, los comensales fueron abandonando de a poco el recinto. No sin antes, llevarse el souvenir correspondiente: Un portarretrato de los tortolitos.
19 de febrero de 2010
Fuente y fotos: El Vecinal
Yo la conozco a georgina ivamos juntos al colegio hace mucho que no tenemos contacto pero se que realmente no es por lo lindo ni por amor que esta con Marcelo Coronel…………..
horrible,espantoso!!!
seguro está embarazada jajajajaja
que feo que es el novio!!