La Cámara de Diputados bonaerense aprobó ayer la iniciativa en una sesión en la que hubo varios temas polémicas. La iniciativa de una diputada del peronismo quita las multas al ejercicio de la actividad, de acuerdo al reclamo de varios organizaciones.
La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó este jueves la derogación del artículo 68 del Código de falta, que pena con arresto a la persona que en ejercicio de la prostitución ocasionara molestias.
La diputada kirchnerista Karina Nazabal fue la autora de la iniciativa. “La prostitución no es un delito, pero tampoco es un trabajo. La solución es tener trabajos dignos, sin embargo era necesario reformar el Código de Faltas de la provincia”, fundamentó.
El artículo 68 del Código de faltas sostiene que “será penado con una multa de entre el quince (15) y el cuarenta (40) por ciento del haber mensual del Agente del Seguridad (Agrupamiento Comando) de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y arresto de cinco (5) a treinta (30) días, la prostituta o el homosexual que se ofreciere públicamente, dando ocasión de escándalo o molestando o produjere escándalo en la casa que habitare”.
El tratamiento del proyecto se dio ayer en medio de una sesión convulsionada por el impulso sin éxito de la oposición para restringir la llegada de Farmacity a la Provincia, y el reclamo de veteranos de Guerra que pedían ser incorporados a un plan de beneficios económicos, pero que no tuvo el apoyo necesario.
Ahora, el proyecto de derogación quedó ahora en manos del Senado bonaerense, quien deberá aprobarlo para que se convierta en ley.
Nazabal ya había encabezado en septiembre una jornada para motorizar el proyecto de ley, impulsado por organizaciones de derechos humanos, feministas y de la diversidad sexual, que desde hace tiempo reclaman contra la derogación de este tipo de artículos en todo el país.
“Este proyecto es parte también de la lucha que llevaron adelanta Diana Sacayan y Lohana Berkins”, argumentó entonces en homenaje a dos luchadoras de la comunidad LGBT. “Tenemos en claro que la prostitución no es un trabajo, pero bajo ningún punto de vista puede reprimirse”, aclaró.
De esa actividad, participaron Marta Fontenla, activista feminista; Sasha Sacayan, coordinador del Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL); y Graciela Collantes, referente de la Asociación de Mujeres Argentinas por los Derechos Humanos (AMADH).
Fontenla había manifestado entonces que la dominación del patriarcado en la sociedad capitalista, y sostuvo que “la prostitución es una consecuencia de la desigualdad que existe entre varones y mujeres”.
Con la llegada al Senado, las organizaciones de derechos humanos se preparan para realizar renovados esfuerzos que permitan que la derogación se sancione lo antes posible. (Latecla.info)
Comentarios de Facebook