Los legisladores kirchneristas y sus aliados bajaron al recinto para dar inicio al informe de gestión de Jorge Capitanich. Tras el quórum, las otras bancadas descendieron para repudiar la presencia del vicepresidente
Minutos después de las 14, el oficialismo logró el quórum y comenzó la sesión en el Senado para que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, brinde un nuevo informe de gestión. Tal como anticipó Infobae horas antes, el vicepresidente Amado Boudou resolvió encabezar el encuentro, pese a que hasta hoy estaba previsto que no lo hiciera y, en cambio, viajara a Colombia. Los titulares de los distintos bloques bajaron al recinto y pidieron la palabra para presentar cuestiones de privilegio para insistir con un pedido de licencia a Boudou. Pero al final, mientas hablaba un legislador kirchnerista, la oposición abandonó la sesión.
Al tomar la palabra, el titular de la bancada kirchnerista, Miguel Ángel Pichetto, aclaró que correspondía sólo abordar la exposición de Capitanich. Sin embargo, el radical Gerardo Morales pidió una cuestión. Lo sucedieron Rubén Giustiniani, Luis Juez, Adolfo Rodríguez Saa y Gabriela Michetti.
«Creemos que dadas las circunstancias y teniendo un procesamiento es altamente recomendable que se aparte del cuerpo. Si situación afecta al Senado y cuando nos representa en el exterior», sostuvo el jefe de la bancada radical.
Morales y Juez se quejaron por la falta de respuesta a sus reclamos formales. «Hace 40 días la oposición le cursó una nota para que tome una licencia para atender a su cuestión judicial», recordó el cordobés. «Su presencia ahí me incomoda», le dijo en la cara a Boudou. También amenazó con abandonar su participación en las sesiones mientras las presida el vicepresidente.
Morales consideró que la oposición no puede dar una sentencia sobre el procesamiento de Boudou por la causa Ciccone, pero sí puede hacer «una valoración política». «Lejos de que tome alguna actitud, mientras usted está procesado usted anda de joda con la Mancha de Rolando. Lo de la joda y esto nos agravia y es una falta de respeto y nos da vergüenza», dijo.
El senador radical anticipó luego que su bancada y otros bloques opositores presentarán un proyecto para que se trate ese pedido de licencia.
A su turno, el socialista Giustiniani coincidió en que la situación judicial de Boudou «incomoda el normal funcionamiento del cuerpo». «No queremos prejuzgar ni juzgar, estamos planteando una cuestión de prudencia, de responsabilidad. nadie está tratando de sacar una tajada electoral de esto. Nos perjudica a todos», explicó.
«Todos los preopinantes hablaron de incomodidad. Podemos trabajar incómodos. Pero la incomodidad es por algo clave en la sociedad: hay muchos ciudadanos que hoy no creen en usted como vicepresidente de la Nación y tienen sospechas», insistió Michetti.
Al final tomó la palabra Pablo González, el representante santacruceño por el Frente para la Victoria. «Cuando escuchan opiniones diferentes se retiran y se van. Estamos acostumbrados, como hicieron en 2001, que se fueron en helicóptero», acusó, mientras los miembros de la oposición se paraban de sus bancas para abandonar el recinto.
«Es cierto que Boudou incomoda. Les incomoda su forma de hacer política, porque estamos convencidos de que la política es una construcción dialécitca, y hoy la oposición renuncia a una agenda autónoma para realizar una campaña mediática», completó la crítica su compañero de bancada Marcelo Fuentes.
«Me siento incómodo de que mis pares hagan caso omiso del mandato de la república, que es la Constitución de la Nación. No pueden decirnos quiénes pueden pertenecer y quiénes no pueden pertenecer a este cuerpo. Pero el que decide es el pueblo. Hay que acatar la decisión de la Cámara de no hacer lugar al juicio político», añadió el correntino José Roldán, sumando argumentos al bloque kirchnerista.
Infobae.com
Comentarios de Facebook