El Vaticano estuvo repleto de camisetas y banderas con los colores celeste y blanco durante la homilía del Papa Francisco. Todos quisieron hacerle llegar a Dios el deseo de todos los argentinos para que Messi y compañía se consagren. Sólo le pido a Dios…
Así como Río de Janeiro se tiñó de celeste y blanco, la plaza San Pedro del Vaticano lució de la misma manera. Durante la misa que brindó el Papa Francisco, los fieles que se acercaron mostraron las camisetas y banderas argentinas, por lo que los colores predominaron en la multitud. «Los Mundiales lograron el encuentro de personas de varias naciones y religiones. Que el deporte promueva siempre la cultura del encuentro», había tuiteado al respecto el propio Sumo Pontífice. También había algunos pocos alemanes, por lo que el rezo argentino se escuchó más fuerte. Sólo le pido a Dios, que Messi traiga la Copa.
Olé
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