Los dos añejos pinos ubicados sobre plazoleta San Martín, venían sufriendo en los últimos tiempos un gran ataque de parásitos (barba de viejo) y además por el paso del tiempo muchas de sus ramas se secaron y se encuentran entrecruzadas con las demás, esto ha generado que con las ultimas tormentas, grandes gajos cayeran sobre la calle, poniendo en riesgo la integridad de los transeúntes y vehículos que circulan por la zona.
Al hacerse una inspección ocular por parte del Ingeniero Luciano Stabile, asesor del área de Espacios Verdes del municipio, se observó que el pino plantado a mitad de cuadra, frente al Club Atlético, estaba prácticamente seco y era irrecuperable, por tal motivo no quedó otra opción que cortarlo. Tarea que se llevó a cabo días pasados.
Con respecto al otro pino, el que marca el paisaje de la zona, ubicado detrás del Monumento a la Bandera, fue evaluado por Stabile y su pronóstico no fue bueno, se encuentra ahogado por las barbas de viejo (parásitos) y gran cantidad de sus ramas se secaron. Igualmente se intentará curarlo.
Hoy mediante el uso de la grúa de Bomberos Voluntarios, operarios del área emprendieron la difícil tarea de retirar la barba de viejo y ramas secas, del pino que tantas veces sirvió de Árbol de Navidad, rodeado de luces, cargado de simulados regalos y que forma parte del final de la calle San Martín, para convertirse en Boulevard, solo por 100 metros y ser el inicio del viaje a la costa del río.
La perdida de uno de estos tan representativos pinos es dolorosa y desde hoy un nuevo paisaje se abrirá ante nuestros ojos, pero por suerte, con esfuerzo y dedicación se podrá recuperar el centinela, ese compañero de la Bandera en las alturas, que seguirá de pie como fiel testigo de acontecer baraderense.
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