
Matador por Tigre, donde se encuentra jugando Lucas en la actualidad, también podría haber puesto de título “Hijo e’ Tigre”, por lo del conjunto de Victoria y porque algún gen de su padre/arquero debe haber heredado, en fin pero lo importante es su historia.

El pasado
Historia que arranca en las categorías Infantiles, a los 4 años con, “mi amigo” «Coco» Sassone, en el ateneo San José, atajando y jugando. Después pasó a Regatas con «Coco» y Santiago Rapalín, otro amigo, donde jugó más de lo que atajó. Posteriormente a la Peña de Boca, siempre como marcador de punta por derecha, también con «Coco». En el 2006 pasó a Atlético. Jugó desde Junio de ese año y todo el 2007 en las infantiles. La mitad del 2006 y la primera mitad del 2007 jugando como marcador de punta por derecha.
A mediados del 2007, decidió volver al arco, porque cuando jugaba con los amigos, atajaba y le parecía que lo hacía mejor en el arco que como lateral. Todo esto con el «Negro» Carreras como entrenador.
Después pasó a las inferiores, y ahí sí, siempre en el arco. Teniendo como técnicos a el «Negro», Leandro Mussi, Marcelo Romero, Guillermo Montero y Mariano De Vincenzo.
En segunda o reserva tuvo como técnicos a Martín Zaldúa y Gustavo Chena. Luego en primera a Gustavo, Julio Genoud y en el último argentino a «Tito» Sassone.
El presente
Hablamos con Lucas y nos contó el presente en Tigre:
Nos dijo lo siguiente: “la categoría en la que estoy jugando es la sexta, hasta ahora me tocó ir al banco en dos partidos. Los dos primeros fueron contra Deportivo Merlo y Quilmes, y este fin de semana será con Argentinos Juniors.”

Cuando le preguntamos si se adaptó y donde vive, Lucas nos dice; “Con respecto al lugar donde estoy viviendo te cuento que ya no estoy más en San Fernando, a mediados de Marzo me mudé a Tigre. Ahora, estoy viviendo en el Nahuel Rowing Club junto con otros jugadores de las inferiores de Tigre. Es un club de remo, que posee unas habitaciones, porque generalmente alberga a las delegaciones de remo cuando se preparan para alguna competencia. Éste club queda a la altura del parque de la costa, pero del otro lado del río Tigre, a unas 5 cuadras de la estación de trenes de Tigre.”

Sobre los entrenamiento nos contaba: “Entrenamos de lunes a viernes de ocho y media a diez y media u once más o menos. El trato de la gente de Tigre ha sido muy bueno, tanto el grupo como el cuerpo técnico, obviamente con el que más afinidad tengo es con el entrenador de arqueros, ya que con él es con quien más tiempo trabajo. Pudimos quedar entre los seis mejores de nuestro grupo asique logramos clasificar a la Copa campeonato. Mañana (por el sábado) en la primera fecha de ésta copa, me toca ir al banco por tercera vez frente a Argentinos Juniors.
El balance hasta ahora es positivo, obviamente, aunque me hubiese gustado que mi nivel fuera otro. Arranque bien en el tiempo de prueba y en las primeras semanas después de haber quedado, pero después del primer mes bajé bastante el nivel. Después de unos meses empecé a ser irregular, una semana levantaba el nivel y a la próxima volvía a bajar. Pero hace un mes más o menos pude levantar un poco mi rendimiento y mantenerlo, aunque considero que todavía me falta subir más para llegar al nivel que espero de mí. Arranqué de tercer arquero como hasta ahora, pero estos partidos me está tocando ir al banco debido a que el arquero titular sufrió una fractura en uno de los dedos de su mano.”
El momento de los saludos “Bueno Ale, muchas gracias por el contacto, y déjame mandarle un saludo grande a toda mi familia y a toda la gente de Atlético, jugadores, dirigentes e hinchas, de quienes siempre tengo un gran recuerdo” culminó diciendo Lucas.
Sin dudas esta es la historia de un chico de nuestra ciudad, como puede haber muchos, que realizó las divisiones formativas en Baradero, que alcanzo a jugar en todas las categorías del fútbol local y que un día emigro al difícil pero a la vez apasionante fútbol de la “A”, historia que sirve para que ninguno de los chicos de nuestros queridos clubes bajen los brazos, sigan entrenando y metiéndole toda la pasión a este amado deporte. Que cuesta mucho… pero es posible llegar y que aún se puede llegar más lejos, ejemplos nos sobran, Darío, Emmanuel y detrás de ellos una camada que seguramente nos dará una gran alegría y sino la cosa no va, habrán realizado una experiencia única e irrepetible y con eso se tienen que sentir totalmente ganadores!!
Lucas te felicito por todo lo realizado hasta ahora, por la clase de pibe que sos y porque sabemos del sacrificio que estás haciendo para poder cumplir tu sueño.
Comentarios de Facebook