El simpático y desestructurado suceso acontecido en el partido del sábado entre Banfield y Temperley, cuando Darío Cvitanich mete un gol con la mano, es anulado y mantiene un breve dialogo con una fotógrafa, fue una linda excusa para entrevistar al baraderense y hablar sobre el buen momento futbolístico en lo personal y del taladro, que se ubica muy cerca de Boca en la lucha por el título.

Dario con la simpleza y simpatía de siempre se sumó a esta nota que incluyó el misterioso dialogo con la rubia reportera grafica de Banfield;

‘Le dije que me lo podía haber dado al gol’. Es una chica que siempre está sacando foto ahí y después obviamente los medios hacen su parte también y se armo más por eso que por otra cosa, pero sinceramente ni me acordaba que me había acariciado la espalda, te juro por Dios no me acordaba nada, de hecho después que llegamos me dice Chechu sabes quién me dijo, porque yo no estaba prestando atención, Bruno, mi sobrino- el hijo de Mauri-, ahora le voy a escribir terrible vigilante le voy  a decir, jajaja». 

¿Brian Sarmiento y vos tienen el mismo peluquero?

«No, no, yo tengo otro peluquero, pero no va a comparar mi corte con el de Brian Sarmiento, lo mío fue simplemente un cambio de lux». 

Entrando al terreno futbolístico, recuerdo que decías que sentías que te costaba volver al futbol argentino y ahora la estas rompiendo, ¿que cambió en vos futbolísticamente en estos meses?

«Después de varios años considero que hay jugadores o por lo menos en lo personal  que nos hace falta también, porque la presión lo que tiene es que te hace estar atento en absolutamente todos los detalles y exigirte al máximo, en cambio el fútbol más relajado, te hace relajarte en todo sentido y quizás no explotar por ahí al máximo las cualidades, entonces a mí volver a Banfield un club que obviamente esperaba mucho dentro de la cancha y saber que tenes que rendir y elevar al máximo todos los aspectos del entrenamiento, de la concentración, de estar los 90 minutos también en un punto me hace bien y por eso me lleva a poder tener un buen torneo y asumir las responsabilidades de estar al frente de un grupo- que también es muy joven- y que hoy más allá de como se termine ha hecho una gran campaña».

Se nota que disfrutas de este momento, ¿Es así?

«Uno disfruta mucho cuando las cosas van bien y miras para afuera y esta tu familia, tus amigos y hoy me puedo hacer una escapada a Baradero para comer un asado, la verdad te llenan el alma y después desde el entrenamiento volver a un grupo, un vestuario de Argentina, concentrar, son cosas que antes no le daba mucha pelota, pero hoy la verdad me pone muy contento, no me cuesta nada, al contrario me dan ganas porque la paso bien y bueno eso cuando estas afuera por ahí no lo tenes tanto, entonces todo ayuda a poder rendir de la mejor manera».

¿Cómo manejas ser ídolo de un club de primera, te lo imaginabas?

«Me doy cuenta de rol que tengo en el club cuando me toca salir en la cancha, es algo lindo, pero no sé si soy del todo consciente sinceramente, por ahí lo llevo muy tranquilo. Mis escapadas son siempre a Baradero, mi vida no cambio absolutamente nada de lo que fue cuando todo empezó».  

Al principio hablamos de Chechu y ahora con el bailando ella también estará más expuesta, ¿hablan sobre eso o ya estan acostumbrado?      

«Siempre tenemos esa relación de dialogo, de hablar todo, de tomar todas las decisiones en familia en su momento cuando fue volver acá, de los seis años que estamos juntos cinco estuvimos afuera, entonces ella dejó un montón de cosas de lado para acompañarme, para ser el sostén, hoy nos toca volver Argentina ella empieza hoy con el bailando y pronto en ESPN y a mí me pone muy contento, porque es algo que también la hace muy feliz, sí obviamente se empieza a tener una exposición mucho mayor, pero nada diferente de lo que habíamos vivido en su momento cuando me tocó estar en Boca.”    

                                          

Comentarios de Facebook