Cuatro días después de haber anunciado una rebaja de la meta de déficit fiscal y de haber asegurado que Argentina ya contaba con el 85% del financiamiento que necesita para este año, el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne convocó a conferencia de prensa para confirmar el inicio formal de las conversaciones con el Fondo Monetario Internacional para obtener lo que calificó como «una línea de financiamiento preventivo» que ayude a acotar la volatilidad global que golpea a los activos financieros argentinos y provocó una fuerte depreciación del peso y de los bonos de la deuda. Dujovne resaltó que el dinero que se obtenga será para poder darle continuidad al programa«gradualista» que está aplicando el gobierno de Mauricio Macri desde diciembre de 2015.
Si bien no informó de cuánto dinero se está hablando (las versiones apuntan a entre 20.000 y 30.000 millones de dólares), Dujovne sí afirmó que será un monto de crédito a tasas más baratas que las que Argentina podría obtener en los mercados financieros, tal como lo ha venido haciendo hasta ahora.
Hace tres semanas, el ministro había estado reunido en Washington con Christine Lagarde, la jefa del FMI. Hoy en la conferencia Dujovne contó que esta mañana habló con Lagarde por teléfono y que posteriormente el presidente Mauricio Macri se comunicó con la funcionaria. «El FMI ha aprendido de las lecciones del pasado», sostuvo el ministro para explicar por qué desde el Gobierno consideran que esta vez el organismo multilateral va a apoyar el plan de gradualismo en lugar de reclamar un ajuste fuerte que reduzca más rápido el déficit fiscal.
Acompañado por los secretarios Guido Sandleris y Sebastián Galiani, Dujovnefue escueto en sus declaraciones y dejó estas definiciones en la breve exposición que dio en el microcine del Palacio de Hacienda:
– Hay un cambio en el contexto internacional. Estamos integrados al mundo y expuestos a la volatilidad. Hoy complementamos los anuncios de recorte del gasto y suba de tasas de interés de corto plazo. Hemos decidido buscar financiamiento preventivo para dotar de estabilidad al mercado.
– Estamos iniciando conversaciones con el FMI para tener una línea de crédito preventiva.
– El FMI apoya nuestro gradualismo, nuestro programa y cómo lo estamos haciendo.
– La mejor manera de proteger el crédito del sector privado es tomar estos fondos del FMI, para mantener abierto el financiamiento a las empresa y las familias.
– Estamos hablando de un FMI distinto al de los 90. El FMI ha aprendido de las lecciones. Estoy seguro de que vamos a poder avanzar con una ayuda que nos permitirá avanzar con nuestro programa.
– Estaremos tomando el financiamiento más barato que tenemos disponible, a tasas inferiores a las tasas de mercado. No aumenta el endeudamiento, porque reemplaza otro financiamiento que hubiéramos tomado a tasas más altas en el mercado.
– No nos atamos a una receta, somos pragmáticos. En el nuevo contexto internacional, cuanto más certidumbre demos, mejor. Esto no resta, suma financiamiento preventivo, siempre pensando en cuidar a los que menos tienen.
-Las tasas, los montos y los plazos son todas cosas que vamos a contestar en los próximos días.
Fuente: clarin.com
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