La medida de fuerza se sintió con fuerza en el transporte público, bancos y administración pública y fue dispar en otros sectores. En este informe, el detalle del acatamiento en esas regiones.
En la ciudad de Buenos Aires, la primera huelga general contra el gobierno de Mauricio Macri -convocada por la Confederación General de Trabajadores (CGT)- fue «contundente»: los transportes públicos no circularon y hubo muy poca actividad en la calle.
Durante la mañana, sectores de izquierda realizaron piquetes en distintos accesos y avenidas. En uno de ellos, realizado en Panamericana y 197, la Gendarmería reprimió con gas pimienta. Desde la CGT repudiaron el hecho, pero se despegaron de esas protestas.
Panorama bonaerense
En cuanto a la Provincia de Buenos Aires, la medida también logró un acatamiento masivo en transportes, bancos y escuelas.
Camioneros fue otro de los gremios que registró un nivel muy alto de adhesión, y paralelamente, realizó protestas en los accesos de diversas ciudades. Ante rumores por “bloqueos” que afectarían prestaciones sanitarias, el secretario de la delegación de Bahía Blanca del gremio, Roberto Arcángel, le dijo a La Nueva que «garantizan el paso de los camiones que transporten servicios esenciales».
Asimismo, se destacó un acatamiento total promovido por la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (Fesimubo), entidad que nuclea a la mayoría de los empleados municipales de la zona.
Dentro de las postales más destacadas, la jornada logró un nivel de adhesión inédito en Guaminí. La contrapartida fue Necochea y Quequén, donde se vivió una jornada habitual, dado que el paro de la CGT tuvo escaso acatamiento.
En tanto, La Plata vivió una jornada a ritmo lento marcado por la ausencia total de micros y la escasa circulación de personas en la calle, mientras que organizaciones de izquierda se instalaron a primera hora en el ingreso a la Autopista La Plata – Buenos Aires.
Además, al «persianazo» adhirió alrededor de un 50 % del sector comercial, mientras que los colegios privados recibieron a pocos alumnos, pero no hubo docentes y por lo tanto no tuvieron clase. En cuanto a los ministerios y entidades públicas, se mantuvieron abiertos pero sin gente y los bancos cerraron sus puertas, aunque garantizaron el funcionamiento de cajeros.
Mar del plata fue otro de los puntos donde se sintió con fuerza el paro general, principalmente en el centro de la ciudad. La nota distintiva la dieron los portuarios, cuyos principales gremios (Soip y Supa) no acataron la acción gremial.
Panorama cordobés
Por su parte, en la provincia de Córdoba, hubo un importante acatamiento al paro organizado por la CGT con movilizaciones en el centro de la ciudad capital. Según manifestaron los dirigentes el acatamiento a la medida de fuera de los sectores vinculados al transporte generó que la protesta tenga contundencia y que la ciudad luzca como un feriado.
En la capital cordobesa hubo cortes realizados por movimientos de izquierda, mientras que dos facciones de las CGT (Rodríguez Peña y Regional Córdoba) marcharon por diferentes puntos de la ciudad durante la noche y la mañana de hoy.
En la provincia gobernada por Schiaretti no se adhirieron a la medida de fuerza el Sindicato de Petroleros y la Cámara de Comercio, por lo que shoppings, supermercados, estaciones de servicio y peajes trabajaron. (InfoGEI) Ga / Mg
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