Todavía hay que superar las legislativas, pero el gobernador bonaerense y el mandamás de Tigre tienen un ojo en las presidenciales. ¿Con qué cuenta cada uno en el resto del país?
Si las elecciones de 2013 están lejos, las de 2015 están lejísimo; sin embargo, cuando de armado se trata, los dirigentes que tienen un ojo puesto en el sillón presidencial se animan a mirar un poco más allá de las legislativas venideras. Entre éstos se encuentran el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y el intendente de Tigre, Sergio Massa, que, dicho sea de paso, son los más beneficiados en casi todas las encuestas.
El primero, de la mano de La Juan Domingo, La DOS y otras agrupaciones, juega sin disimulo, aunque, por ahora -y es importante hacer hincapié en el “por ahora”-, desde adentro del “proyecto nacional y popular”. El segundo, con la seguridad como caballo de batalla, juega en silencio, a escondidas y un poco más afuera que el primero.
Aunque el equipo que se forme por estos días será importante para lo que sucederá en 2015, lo cierto es que 2013 será de vital relevancia. En el sciolismo ya se animan a decir que irán con lista propia, o, por lo menos, lo “advierten” Y en el massismo recorren la Provincia, ya con un bloque en Diputados de siete integrantes, al que posiblemente sigan sumándose ex denarvaístas, tal como sucedió con Mónica López y María Elena Torresi.
Los números los dan arriba, y se ven en la necesidad de expandirse y sumar a los que quieran hacerlo. Dirigentes peronistas y de otros sectores de gran parte de las diferentes provincias militan por Scioli 2015 y se interesan por los planes de seguridad de Massa. Intendentes, legisladores, concejales, sindicalistas y empresarios hacen que estos dos bonaerenses con intenciones de escalar derriben las fronteras del territorio de la Provincia.
Las estrategias son diferentes, pero el objetivo es el mismo. La idea es mostrar poder para después plantarse con seguridad ante cualquier eventual futura negociación, que, al parecer, no incluirá al kirchnerismo. La disputa por la coparticipación, aunque ahora se le intente bajar el tono, hace que la ruptura del sciolismo con Nación se vea cada vez más cercana. En tanto, desde el massismo ya dieron claras muestras de que el juego no será con los K.
“Están las primarias obligatorias, en las cuales pensamos participar con candidatos propios”, señaló Baldomero Alvarez de Olivera, senador bonaerense de La Juan Domingo, en una entrevista concedida al diario cordobés La voz. Le habían preguntado si en Buenos Aires acordarían con los K la lista de candidatos a legisladores, en el marco de la contienda electoral de este año.
En la otra vereda, el dirigente Fernando Galmarini, suegro de Sergio Massa, en un acto realizado en Quilmes dijo que la idea es que el tigrense se la juegue solo. “Queremos que Sergio Massa encabece la lista de diputados nacionales en el 2013 que tiene que ganarle al Frente para la Victoria”, señaló el padre de Malena Galmarini, ante la atenta mirada de un centenar de peronistas.
El juego está planteado. Scioli y Massa arman por separado, sin descuidar las legislativas pero con los cañones apuntando a las presidenciales. ¿Hay posibilidad de una interna entre ambos? Claro que la hay. Desde el entorno del jefe comunal de Tigre no temen a las “aspiraciones” del Gobernador, y se molestan cuando se nombra a Massa como sucesor de Scioli, aunque por lo bajo reconocen que ésa también es una alternativa.
La relación entre ambos es buena, pero hasta ahí nomás. Hay alguna que otra cuenta pendiente del pasado que hace que la confianza no sea ciega, ni mucho menos. Hoy por hoy los dos apuntan bien arriba. Ya llegará el momento de dejar los egos a un lado y pensar en conjunto (o no). Mientras tanto, el armado avanza, de a poco pero avanza.
Latecla.info
Comentarios de Facebook