Esta perrita está perdida y por las condiciones en la que está debe tener una familia (si es que no la abandonaron) ya que se encuentra castrada, limpia y es muy obediente y cariñosa.
Estaba el jueves 24 de mayo a la noche en la escuela Marcos Sastre y el viernes 25 apareció en la zona detrás del anfiteatro. Tiene una de sus patitas accidentada, ahora está bien pero le quedó mal soldado el hueso y no puede apoyarla para caminar.
Tiene aproximadamente 7 años, según nos explicó el veterinario, y parece saludable.
Esta en busca de su la familia o personas que quieran adoptarla.
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