Ya el domingo pasado se vivió algo parecido, lo cual repudiamos en su momento, Sportivo iba perdiendo frente a Gral. Rojo y algunas personas (no todas) de la hinchada, salieron de la cancha, para arrojar piedras al lado visitante, el jueves, luego del partido de Atlético un puñado de personas escondidas en la oscuridad también le arrojaron piedras a los simpatizantes de Atlético que iban saliendo de la cancha, entre ellos muchas familias con chicos, mujeres, etc.
Una verguenza y algo que deben replantearse quienes les regalan la entrada y le permiten retirarse una vez finalizado el partido, cuando la hinchada local debe esperar más de 20 minutos, como medida de seguridad para garantizar la desconcentración de hinchas visitantes.
Ojalá que esto no se vuelva a repetir, es muy lindo escuchar el cantico de la gente, el ruido de los bombos y los trapos colgados en el alambrado pero si para eso tenemos que pagar el costo de un nene lastimado o cualquier otro hecho de violencia… que se termine ya!
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