El descargo de Antonio Laje

El periodista Antonio Laje utilizó su programa Buenos días América, para defenderse de las acusaciones de maltrato que viene teniendo desde hace unos días.

“Para mi es dificilísimo hablar de este tema, la verdad que nunca me imaginé que iba a estar en una situación así. Pero yo soy esto, ustedes me ven todos los días al aire, me acompañan, me acompañaron muchísimos años, cosa que yo les agradezco muchísimo. Me hicieron crecer, hicieron crecer al programa, los programas donde yo estuve, y confiaron y confían en mí. Por eso es que yo necesito hablarles a ustedes.

Tuve toda una semana realmente durísima, insisto nunca pensé que iba a para una cosas así. Uno aquí está acostumbrado a tocar distintos resortes de poder y siempre atentos a que puede pasar algo, nunca pensé con la violencia, con la virulencia, con la maldad y con la agresión de los que estuve viviendo y viviendo mi familia durante estos últimos días. Ya tengo el alma destruida, la verdad que tengo el corazón recontra partido de lo que estuve viviendo.

Hace muchos años que yo estoy en esto, hace 30 años. Y san que, no me importa llorar, hace más de 30 años que hago esto. Me toco crecer con los periodistas más exitosos y exigentes, me toco empezar a formar equipos. Empecé como muchos, empecé en radios truchas, pagando con un sueldo el espacio con amigos, trabajando gratis en radios, hasta que finalmente pude empezar a conseguir mi primer trabajo pago y empezar a crecer. Lo hice rompiéndome todo porque yo creo en el esfuerzo, creo en el mérito y creo en las exigencias. Yo no creo en los maltrato, la verdad que no, yo creo en exigencias. Desde mi carrera en donde fui avanzando y tuve la suerte, porque la verdad es un privilegio de poder crear medios de cero, de poder formar equipos, de ver que dentro de esos equipos hoy,  hay periodistas brillantes que han salido de acá, de mi lado, de mi escuela, de mi programa y que hoy se destacan en muchos otros medios. Mis productores, los productores de este programa (que tengo un solo productor varón, son todas mujeres) el éxito de la producción de este programa pertenece a todas mujeres, sistemáticamente las vienen a buscar de otros canales, como vienen a buscar de otros canales a columnistas míos.

No es fácil este trabajo, son cuatro horas y medias de aire, acá se vive tensión, acá estamos minuto a minuto y obviamente tampoco es para todos este trabajo, y que no sea para todos no quiere decir que uno sea bueno o malo, quiere decir que tal vez sea otro el trabajo que hay que hacer y que esto no se soporta fácilmente, cuatro horas de aire con la tensión que significa estar permanentemente compitiendo con doce canales más (porque además esta franja es la más competitiva de la televisión, porque todas las señales a esta hora, estamos todos con lo mismo). Hay que estar acá, yo les aseguro que es muy difícil este trabajo con la tensión con la que se vive. Sí, yo no soy, ya me conocen, no lo oculto, no soy chispita, no soy campanita; soy serio, soy tímido, recontra tímido y muchas veces parezco hasta maleducado por la vergüenza que me dan las cosas, porque a pesar de estar frente a una cámara, a mí me da vergüenza estar en la calle, me da vergüenza que me reconozcan, yo soy muy tímido. Obviamente que tengo un humor, a veces, de perro y que cuando las cosas salen mal me enojo, claro que sí, porque quiero que salgan perfectas porque del otro lado están ustedes y se merecen que todo esté bien. Si se corta un audio, si sale mal un graph si me enojo y ni siquiera lo oculto porque a veces me enojo y ustedes se dan cuenta que estoy enojado. Pero yo me enojo desde lo laboral, no me enojo con una persona, no enojo desde lo personal.

Hace muchos años, lo veo a Wally (persona que está frente a él), hace como veinte años me decía “hasta vos algún día vas a poder conducir” hace veinte años me lo decía. Trabajo acá hace muchos años, esta debe ser la tercera cuarta etapa mía y yo les puedo asegurar que no hay ninguna denuncia sobre mí en ningún lado, ni en el canal ni en recursos humanos porque yo no soy maltratador, porque yo me puedo equivocar, porque yo puedo exigir (tal vez exijo mal) pero de ninguna manera soy una persona maltratadora. Tengo unos valores enorme a lo que agradezco a mis padres y a la familia que tengo, porque los tengo, los sostengo y los voy a tener, los voy a sostener siempre y es lo mejor que les voy a dejar a mis hijos. Pero este ataque feroz para destruirme, para destruir a mi familia no tiene nombre, la verdad es que no tiene nombre. Yo quiero separar dos cosas de estos. Porque en medio de toda la exigencia que yo tengo, es muy probable, tal vez, los años cambian, todo cambia — tiene ocho años, yo hace muchos años, hace casi treinta estoy en esto y evidentemente las cosas cambian y a veces uno no cambia con el ritmo que tiene que cambiar y yo no tengo ningún problema en pedir disculpas si alguien se sintió maltratado, lo único que quiero dejar en claro es que acá no hay maltrato. Yo exijo, quiero que las cosas salgan bien, es lo único que me preocupa porque a dramas es así como se forman los mejores profesionales que después se van aotros lados. Crecen en América y muchas veces los vienen a buscar de otros canales siempre, y los pueden ver en muchos canales a gente que trabajó conmigo aquí en Buenos Días América y que tuvieron una experiencia. Porque Buenos Días América es una escuela increíble, es increíble. Pero no todos tienen ni porque soportar la tensión de las cuatro horas ni por que gustarle. En el medio obviamente que hay gente que va quedando, porque además, nosotros probamos, probamos formatos, probamos temas, hemos probado espectáculos veinte veces, no nos funciona espectáculo, pero no es que no nos funciona porque la gente es mala, sino porque no nos funciona a nosotros porque en este formato y en este horario, evidentemente espectáculo al menos a nosotros no nos funciona. Eso no quiere decir que sean malos profesionales porque de hecho quienes estuvieron en espectáculo con nosotros hoy brillan en otros canales.

Pero esto es el trabajo, esto es la televisión. Es exigencia. Sí, yo soy exigente. ¿Tengo mal humor? Sí, muchas veces tengo mal humor. Vengo cansado, son muchas horas de aire, se levanta uno muy temprano, a veces me toca volar y llego más tarde y más cansado. Pero de ninguna manera, está en mí maltratar. Y si le quiero agradecer a dos personas que hablaron de maltrato, pero se los quiero agradecer. Porque tal vez, uno no entiende que por más que para mí no sea maltrato y sea solamente laboral y yo termino el programa y todo está bien, para alguna persona puede no estar todo bien. Uno tiene que entender eso y yo tengo que entenderlo, que no pasa por lo que yo creo que es maltrato, pasa por lo que la otra persona siente. Y si la otra persona se sintió atacada yo le pido, de corazón, disculpas. Y se lo pido cara a cara, donde me diga, voy, me siento y se lo pido cara  a cara porque no merece de ninguna manera sentirse mal.

Lo único que yo tengo de tranquilidad es que jamás quise maltratar a nadie. Lo único que tengo de tranquilidad son valores enormes, porque los tengo, y lo voy a seguir sosteniendo. Por eso me siento y les cuento, por eso no quise hablar la semana pasada porque era tan furibundo el ataque, tan brutal, tan operado en algunas cosas. Basado, por supuesto, en gente que sí se sintió mal y que yo respeto y de acá de vuelta, les pido de corazón disculpas. Yo tengo que entender que no pasa porque para mí esto es trabajo y lo que está en el trabajo, queda en el trabajo. Porque no, porque hay gente que con todo derecho lo siente de otra manera y a esas personas yo les tengo que pedir disculpas de corazón. Después no sé de donde viene el ataque. Tengo claro que están intentando bajarme, liquidarme, sacarme del aire, destruir a mi familia. Yo estoy acá, yo dí la cara siempre, toda la vida di la cara y yo la voy a seguir dando a la luz de esto, ¿saben qué? Yo vivo a la luz, no ando en las sombras. No me escondo en redes, yo estoy acá todos los días en el mismo horario, en un canal de televisión que me abrió las puertas siempre y que no permitiría jamás que yo maltratara a alguien si ellos consideraran que estoy maltratando. Y acá voy a seguir, al menos por ahora, voy a seguir acá dando la cara y de nuevo, mil disculpas a los que se sintieron lastimados, no fue jamás mi intención.”

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