El joven Nicolás Castillo, vivía en Rió Tala junto a su familia, el 14 de enero del 2015 por la mañana salió de su casa y no volvió.
El 16 de febrero, un mes después de su desaparición, su cuerpo fue hallado semihundido en un bañado cercano al río Arrecifes. Las primeras pericias aseguraron que el cuerpo llevaba más de dos semanas fallecido.
¿Quién mató a Nicolás? es una pregunta que aun la justicia no pudo responder, ese silencio y hasta maltrato de la fiscalía a cargo, generaron que Mercedes Robles, una madre que no encuentra consuelo vuelva a recurrir a los medios para que se active la causa y alguien le diga quién mató a su hijo.
¿Mercedes ha pasado mucho tiempo desde la muerte de su hijo, que novedades ha tenido?
“Hace una año y diez meses que no tengo nada concreto, ni una respuesta, nadie sabe quien lo mató, nadie vio nada, solamente se apuntó a familia en todo momento, siempre se siguió la línea de la familia, a mí no me molesta que lo investiguen, que hagan todo lo que quieran, porque yo sé lo que son mis hijo. Estoy viajando a San Nicolás y sí ahí no tengo respuesta buscare otros medios, me iré a la Plata. Nosotros queremos respuesta, queremos saber ¿Qué pasó?, ¿Por qué?, ¿Quién lo hizo?, ¿Por qué lo hicieron?, porque no se mató a un perro, un pájaro o lo que sea, se mató a una persona».
¿La hipótesis que se hizo pública fue la sospecha sobre la familia?
«Así como usted está sorprendido, yo también, quizás lo hicieron para desviar la investigación, para que estuviera más encima de la familia y no se investigara en otro lado, donde se tenía que realmente investigar. Se hicieron cuatro o cinco allanamientos en mi casa que a mí en ningún momento me molestó, porque yo sé lo que mis hijos van a declarar. En un momento han llevado a mi nuera a declarar a la comisaria y la han presionado para que dijera que su marido lo mató- es decir mi hijo- y yo eso se lo dije en San Nicolás al secretario del Fiscal General. Ellos me dijeron que no había ningún otro aporte con certeza o con seguridad de que pueda seguirse la investigación, porque ellos no tienen de donde agarrase».
¿No hubo declaraciones, testigos, que hayan aportado algo en todo este tiempo?
«Yo aporte datos de unas declaraciones que para mí son importantes y que en una computadora no están. Lo que aportamos el otro día son unas capturas de unos mensajes que le han estado escribiendo a mi hija. Yo creo que si hubiese habido un problema- pienso como mamá- hubiese sido mejor que vinieran y me lo hubiesen dicho, pero no creo porque él era de contarme todo, él era de hablar siempre conmigo e incluso se había venido a vivir conmigo. Se dijeron tantas cosas, hay personas que han dicho que a él lo vieron que le estaban pegando en el paso a nivel de las vías de la primera entrada a Tala, que hubo una persona que vio, pero nunca dijo nada, murmuran pero no dan la cara. Otros dicen que le estuvieron pegando frente a una gomería, pegado al lado del basural de Baradero, otros dicen que le estaban pegando al lado del rio, otros dicen que lo mataron adentro de mi casa en el fondo, adelante, yo quiero saber la verdad, que pasó, yo no sé si mi hijo fue culpable en algo, sí hay algo que no debió hacer, no sé, por eso deseo saber la verdad».
¿Qué dice el informe de la autopsia?
«La autopsia determinó que tuvo un fuerte golpe en la nuca que fue lo que le produjo la muerte. Yo estuve hablando con diferentes clases de abogados y todos me dijeron que no me detenga, que siga, porque para mí todo fue raro como actuaron, como hicieron las cosas.
Si usted tiene plata se soluciona todo rápido, si fuera hijo de un juez, de un policía, un fiscal, un abogado, alguien de poder o alguien de plata quizás hasta un perejil paga a veces las causas. Con el de mi hijo ya es el tercer caso que pasa en Río Tala, que los matan y no encuentran a los culpables, nadie sabe quien lo mató, nadie sabe quien lo hizo, nadie sabe nada, cuantos casos más tienen que pasar».
¿También se dijo que había manchas de sangre en el auto de la familia?
«Porque no me llamaron cuando hicieron el peritaje en el auto para que yo me presentara con mi abogado y días después me entero que lo hicieron y salió en las noticias que habían encontrados manchas de sangre en el mismo. Me canse de pedir las cámaras de PREAR, me canse de pedir las cámaras de la ruta, las cámaras de los caminos que iban hacía San Pedro, nunca me las pudieron conseguir y ¿Por qué?, un día el Doctor Manso cuando tengamos las cámaras me dijo a mí y a mi esposo los vamos a citar para que ustedes se acerquen y colaboren mirando las imágenes, pero nunca nos llamaron y a los días salen con que al auto lo vieron para el lado del río».
¿Es verdad que usted no pudo reconocer el cuerpo?
«Cuando encontraron el cuerpo a mí nadie me aviso nada, me entere por los medios y ya habían dicho que era mi hijo, cuando llego allá -al lugar- no me dejan pasar a reconocer el cuerpo.
Yo nunca vi el cuerpo de mí hijo y no sé si en el cajón hay un cuerpo y eso es lo que me tiene torturada. Porque todos me dicen como vos no viste si hay o no hay cuerpo en el cajón. Yo quiero saber la verdad, no quiero que haya otro Nicolás, otro José, otro Gutiérrez más, Dios no trajo al mundo y no para que nos maten los demás, él único que nos quita la vida es él.
«Decían que por la radio y por internet yo había reconocido el cuerpo y que yo había reconocido una remera azul, cuando a mi me mostraron la remera de otro color. Después que le hicieron la autopsia lo llevaron al cementerio local, pedí ir nunca me dejaron. Yo tenía el derecho de ver el cuerpo de mi hijo. La foto del cuerpo de él llegó hasta Tucumán, ¿por qué lo hicieron?, cuando eso tendría que estar archivado, lo tiene que saber solamente la justicia, lo han hecho recorrer todo el mundo como si fuera una estampita, porque burlarse de esa forma, porque hacer sufrir a una madre».
¿Usted tuvo un altercado con el Fiscal de la causa el Dr. Manso?
«Si porque hay un cuerpo que yo nunca reconocí, un ADN que tardó casi 5 meses y que me llegó por un fax, cuando eso tendría que haber llegado cerrado y abrirlo delante de mí, yo le pedí que quería exhumar el cuerpo, hacer un nuevo ADN, porque yo como mamá tengo todo el derecho de hacer lo que yo quiera y el fiscal está para apoyarme en todas mis decisiones, en todo lo que yo quiera, pero me dijo que no era necesario, porque ya el ADN estaba, era un gastadero.
Luego me increpó diciendo usted piensa que yo le falsifique un ADN, le dije yo no estoy diciendo esas cosas y que en todo caso lo estaba diciendo él, entonces se enojo y me dijo que me fuera del despacho l, que no tenía más nada que hablar y que si yo quería saber algo que fuera a fiscalía general, que con él yo no tenía más nada que hablar, me saco y empezó a los gritos como si estuviera hablando con un delincuente, con un asesino, me hecho de la fiscalía, me hizo sacar con la policía».
En fiscalía general me dijeron que el Dr. Manso no quería seguir la causa y el fiscal general le dijo que no que tenía que seguir con el caso de mi hijo hasta que se sepa la verdad, pero a la vez y hablando con el abogado que me asignaron en San Nicolás el me dijo que si no teníamos otros aportes como para continuar la investigación el caso se iba a cerrar y no se iba a poder resolver».
¿Confía que se sabrá alguna vez quien mató a Nicolás?
«Otro caso en Tala en un pueblo tan chiquito, pero confió en Dios, yo sé que Dios no me va abandonar, porque él sabe lo son mis hijos, Dios sabe lo que fui yo con todo el mundo, yo confió en el ciegamente y voy a luchar hasta saber la verdad. Yo creo que mi hijo no se lo merecía, porque él era un pibe que a todo el mundo le abrió las puertas, todo el mundo lo respetaba, él nunca tuvo peleas callejeras, nunca tuvo problema con la policía, nunca fue chorro, nunca fue un violador, nunca fue nada de eso, quizás porque no es un hijo de un poderoso o porque no tengo plata o no sé porque lo hicieron, no lo entiendo ,pero lo único que les digo es que yo tengo un Dios, yo sé que tarde o temprano me va hacer ver y esas personas van a caer y yo sé que esta causa no se va a cerrar porque confió en mi señor que él no lo va a permitir.”
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