La Justicia confirmó la prisión preventiva para Gustavo Rocha, Lucas González Bonomo y Alex Iñiguez, tres de los imputados en la causa por el crimen de Jeremías Sosa, ocurrido en febrero en la localidad bonaerense de Olivera. El cuarto detenido, Franco Gutiérrez, ya se encontraba cumpliendo con esta medida desde mayo. Los otros cuatro acusados permanecen prófugos, y vecinos denuncian que no hay una búsqueda activa por parte de las autoridades.
La Plata, 07 Jun (Por InfoGEI).-Han pasado más de tres meses desde que Sosa, un joven albañil de Misiones, fue asesinado a golpes tras ser erróneamente señalado como un ladrón. A pesar de algunos avances judiciales, el caso continúa sin resolverse por completo.
Según reporta El Civismo, la Sala II de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de Mercedes avaló este jueves tanto la prisión preventiva como la calificación legal de la causa para tres de los ocho imputados, quienes fueron arrestados en los primeros días de la investigación. La decisión fue tomada luego de que la defensa apelara una resolución del Juzgado de Garantías N.º 3, a cargo del juez Patricio Arrieta, en busca de modificar la figura penal.
La fiscal del caso, María Laura Cordiviola, titular de la UFI N.º 10, sostiene la imputación de “homicidio agravado por alevosía”, delito que prevé penas de prisión perpetua.
En cuanto a Franco Gutiérrez, se entregó voluntariamente el 21 de abril y desde el 28 de mayo permanece bajo prisión preventiva. Actualmente, está alojado en una unidad penitenciaria en Virrey del Pino. En tanto, Iñiguez y González Bonomo se encuentran detenidos en Florencio Varela, y Rocha, en una cárcel cercana a La Plata.
Los imputados que siguen prófugos
El caso sigue generando malestar entre los habitantes de Olivera, especialmente por la situación de los otros cuatro acusados: Agustina Atrio, Walter Atrio, Matías Atrio y Néstor Rebottaro, quienes cuentan con pedido de captura nacional desde fines de marzo. Ninguno ha sido localizado.
Fuentes vinculadas a la investigación señalan que los prófugos tienen importantes recursos económicos y contactos estrechos con miembros de la Policía Bonaerense y otras fuerzas, lo que podría haber facilitado su desaparición.
Prófugos no los buscan
Testimonios e indicios recabados apuntan a que no solo participaron activamente en el linchamiento, sino que también habrían utilizado sus influencias para evadir la acción judicial. Felipe Crivelli, expolicía y pareja de Agustina Atrio, fue desvinculado de la causa.
Para muchos vecinos, la falta de avances en la búsqueda no es una coincidencia. “Es evidente que no los están buscando. Y todos sabemos por qué”, expresó un allegado a la familia de uno de los detenidos.
El caso Sosa
Jeremías Sosa había llegado desde Misiones para visitar a familiares en Olivera. La noche del 22 de febrero, entre las 22:00 y 22:30, caminaba por la calle Juan XXIII cuando fue interceptado por un grupo de personas que lo acusaron de intentar ingresar a robar en algunas viviendas.
De acuerdo con la reconstrucción de los hechos, uno de los agresores lo golpeó en el rostro y lo derribó. Luego se sumaron otros atacantes, que lo golpearon brutalmente mientras le gritaban y le exigían que no se moviera.
Salvajismo
Testigos aseguraron que Sosa pedía auxilio y suplicaba que dejaran de pegarle, pero la golpiza continuó a la vista de numerosos vecinos. Aunque algunos intentaron intervenir verbalmente, nadie logró detener la violencia hasta que llegó la Policía.
El joven fue hallado inconsciente, con una soga atada al cuerpo. Fue trasladado al Hospital Zonal Nuestra Señora de Luján, donde los médicos confirmaron su fallecimiento debido a un severo traumatismo craneoencefálico que le provocó un shock neurogénico.
Sospechas de encubrimiento
Desde el inicio, el caso estuvo rodeado de sospechas de encubrimiento, especialmente tras conocerse los vínculos de algunos de los implicados con fuerzas de seguridad. Para muchos en Olivera, esas sospechas hoy se han transformado en certezas: la falta de acción frente a los prófugos confirma, a su entender, que la Justicia no actúa con la misma firmeza cuando los acusados tienen poder o contactos.
La comunidad sigue reclamando justicia completa para Jeremías Sosa, mientras la mitad de los imputados continúa en libertad, sin señales claras de que estén siendo buscados activamente por las autoridades. (InfoGEI)Ac
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