Debutó la nueva tira de Pol- ka con un muy buen nivel de audiencia. Durante toda la emisión superó los 20 puntos de rating y llegó a promediar casi 21 puntos, un muy buen número para un debut en un verano flojo de números para todos.
La Historia:
Juan Cousteau (Suar) lleva una vida que podríamos definir como «apacible»: está casado, tiene cinco hijos y hace quince años que trabaja como director de una orquesta de cámara. Pero su mundo entra en crisis cuando su esposa Ingrid, «La Polaca» (Santa Ana) le pide un tiempo para «reencontrarse consigo misma y descubrir quién es». Para peor –y, en parte, como consecuencia de su crisis marital- pierde el trabajo. Félix (Minujín) -un viejo amigo de la infancia y, además, presidente de una discográfica- acude en su rescate: le ofrece un puesto en su empresa y le presta un departamento donde vivir.
Así, Juan conoce a Aurora (Oreiro) su nueva vecina «pared de por medio». La atracción es casi inmediata. Ella es peluquera y tiene un centro de estética en la misma cuadra del edificio donde ambos conviven. Al poco tiempo de compartir «pasillos y ascensores», Juan descubre que esta atractiva joven es la amante de Félix.
Aurora busca ser «algo más» en la vida de Félix. Pero él, casado con Michelle (Fontán) no tiene intención alguna de separarse: no sea cosa que pierda su posición de privilegio en la compañía discográfica, propiedad de su mujer.
Ante este panorama, Juan tendrá que dividirse entre la lealtad hacia su amigo -aunque no comparta sus «manejos deshonestos» con su mujer y su amante- y el amor hacia Aurora, que cada día parece ser más profundo.
Pero además Juan tendrá otros motivos de preocupación constante: los concernientes a sus cinco hijos en crecimiento; desde la más chica, con apenas 5 años, hasta la más grande, con 20; a esto se suma los conflictos con «La Polaca», la tensa relación con Denise (Bellati) su egoísta hermana y con Lautaro (Puig) su padre, que acaba de «salir del placard».
Para Aurora la vida tampoco será fácil. Además de su complicada relación con Félix, deberá mediar siempre entre Rosita (Picchio) su demandante madre y Orlando (Alberto Martín) su padre, un auténtico «chanta» argentino.
Así comienza esta historia de amores que van y vienen, de vidas que se complican y cambian. Una comedia que va a divertir, sorprender y emocionar.
En «Sos mi Hombre», Gloria (Tobal) sigue luciéndose en el reality show en el que participa y, por eso, los productores están muy contentos con su desempeño. Pero, inesperadamente, ella se descompensa al aire y con eso capta la atención de los televidentes.
Aprovechando la situación, la producción alerta a Ringo (Castro) de lo ocurrido. El boxeador, asustado, acude al encuentro de Gloria sin saber que cada uno de sus movimientos están siendo registrados por las cámaras del programa.
Ya frente a frente, Gloria le confiesa a Ringo el motivo de su desmayo: está embarazada. Atónito ante la noticia, él no sabe cómo reaccionar y también olvida que la situación está siendo transmitida, en vivo y en directo, por la televisión.
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