Daniel Scioli reunió el viernes pasado a más de 60 intendentes por un acto fuera de agenda por el Día Mundial del Agua.
La estrategia de Daniel Scioli de sumar como aliados a los intendentes bonaerenses en el conflicto docente se diluye poco a poco. Trascendió en las últimas horas que una cantidad importante de jefes comunales no están dispuestos a firmar una solicitada donde se explicita un «apoyo» al gobernador en la puja salarial con los maestros, lo que obligaría al mandatario a repensar la próxima jugada ante el inminente anuncio de nuevos paros y aulas vacías.
El viernes pasado, en un acto fuera de agenda, Scioli reunió a más de 60 intendentes afines y opositores. Con el objetivo de neutralizar las protestas gremiales, les pidió «acompañamiento» para convencer a los docentes de que la oferta de 22,6% responde a un gigantesco «esfuerzo» de la Provincia. «Expliquemos a la comunidad lo que estamos haciendo juntos desde hace cinco años. Esto no lo hace el gobierno provincial, juntos lo estamos haciendo los intendentes, los trabajadores y los que pagan los impuestos», remarcó el gobernador días atrás. «Estamos con la mitad de los días de clases con paro. No puede ser que 4 millones y medio de chicos con los 320 mil docentes estén en esta situación», rezongó.
Lo que muchos intendentes no esperaban es que Scioli tenía planeado materializar ese pedido con la firma de una solicitada que en un principio se pensó publicar en diarios nacionales y provincias entre martes y miércoles, pero que ahora quedó en stand by. Durante el fin de semana los intendentes recibieron los incesantes llamados de Alejandro Arlía, ministro de Infraestructura provincial y brazo ejecutor de la captura de voluntades. Según pudo averiguar ámbito.com, Arlía fue el encargado de buscar el «apoyo» de los intendentes. Es que el ministro tiene el poder de recordarles las obras que el Gobierno provincial tiene previstas para sus ciudades o asegurar futuros compromisos.
De otro lado de las líneas telefónicas, Arlía se encontró con una postura uniforme: todos los intendentes consideran que el tema educación es «responsabilidad exclusiva» del gobernador. Entre ellos, analizan y coinciden que firmar la solicitada sería hacerse cargo de un área que depende de la Provincia y que parte del sciolismo utiliza para enfrentarse al Gobierno nacional.
Pero en particular, los jefes comunales coincidieron en rechazar el punto 2 del texto que empezó a circular desde el viernes. Creen que el «apoyo» puede tener una lectura más allá de la situación complicada que atraviesa la educación y que podría ser leído como un apoyo a la figura del gobernador, en momentos de excesiva especulación electoral.
Además, entienden que la politización del conflicto serviría para que Scioli se saque la responsabilidad sobre la administración del sistema educativo y que podría ayudarlo a mostrar un respaldo político que trasciende el conflicto docente, cuestión a lo que los intendentes escapan.
• Sin apoyo
Ámbito.com tuvo acceso al texto de la solicitada que Scioli pretende que firmen los intendentes para avalar su estrategia de negociación en el conflicto. Se titula «Con los chicos en el aula» y tiene un párrafo introductorio y tres puntos.
A continuación se reproduce el contenido del documento original que llegó a los jefes comunales, que por estar horas puede ser modificado o directamente desechado.
Los abajo firmantes, Intendentes de la Provincia de Buenos Aires, ante los hechos de público conocimiento que han impedido el normal desarrollo del ciclo lectivo, manifestamos:
1. Nuestra convicción de que la Educación Pública es un derecho universal de nuestros chicos. En ese sentido, por justa que sea una reivindicación salarial, debe compatibilizarse cualquier reclamo con el derecho de nuestros hijos a aprender en las aulas de las escuelas.
2. Nuestro apoyo al Gobernador Daniel Scioli, quien ha dado muestras durante sus 5 años de gestión, de su vocación por jerarquizar la educación, con mejores salarios y obras edilicias, articulando su política junto a La Nación y a los Municipios.
3. Pedimos que se entienda que la legitimidad del reclamo no puede avasallar el derecho de los niños a aprender y que 4.500.000 de pibes están perdiendo días de clase, valiosos para la construcción de una sociedad más justa, porque no hay herencia social mayor que la Educación.
• Sin salida
Este domingo el ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, advirtió a los docentes que entraron en un «callejón sin salida» por la serie de paros que realizan desde el inicio del ciclo lectivo, y que la Provincia ya formuló «la mejor oferta» disponible, al aludir al 22,6% de aumento salarial.
Desde Suteba, el dirigente Roberto Baradel, en tanto, advirtió que en caso de cerrar las negociaciones los caminos conducirían a un «conflicto permanente». El sindicalista destacó que «la paritaria no esta cerrada» y añadió que «la trampa que nos ofrecieron consiste en darnos un 12,6% de aumento en marzo y el segundo tramo en setiembre, mientras que el piso nacional pautaba un 16,5% en el primer tramo».
Baradel también se refirió a la estrategia de la Provincia de encolumnar a los municipios. «Mientras 40.000 docentes se reunían en La Plata, Scioli le pedía ayuda a los intendentes y nos solicitaba que volviéramos a dar clases. Nosotros volvimos a las aulas hasta el día de hoy, pero no tuvimos ninguna convocatoria», sostuvo.
Los docentes analizarán este lunes como continúan el plan de lucha, mientras mantienen la exigencia de un aumento del orden del 30%.
si crossi no firmó, bien por carossi. si firmó tendrá que hacerse responsable.