Padre Rubén Real
A raíz de la renuncia del Papa Benedicto XVI, que conmovió a todo el mundo, quisimos conocer la opinión de uno de los párrocos de nuestra ciudad, por tal motivo dialogamos con el Padre Rubén Real, a cargo de la Capilla Nuestra Señora de Lujan:

“Sin duda la renuncia del Santo Padre ha sido algo que nos llenó de sorpresa y según se dice también a su colaboradores mas cercanos en el Vaticano, era algo que el Papa tenia muy en reserva. Lo más importante de esto es que el Papa es un hombre de muchísima oración y alguien que ha buscado siempre cumplir la voluntad de Dios. Entonces esta decisión del Santo Padre no es un arrebato del momento, es algo que lo ha venido meditando y pidiendo consejos largamente y que el en un acto que es en muchos aspectos de valentía porque reconoce sus limitaciones. No hay una enfermedad seria del Papa, pero si las limitaciones propias de la edad, es un hombre de 86 años y pensar lo que es la responsabilidad y el peso de llevar toda la iglesia. Y los tiempos han cambiado, no son los mismos los tiempos de hace 50 años atrás, todo ha cambiado muy vertiginosamente y el Papa se da cuenta que no puede seguir llevando adelante la tarea, por eso toma esta decisión de la renuncia. El ya había dejado entrever algunas veces, en algunas intervenciones que había hecho, incluso en uno de sus libros, esta posibilidad, pero en realidad fue algo que llamó la atención por lo inesperado. Si bien no es lo que mas se  ha dado a lo largo de la historia, fueron pocos los Papas, cuatro en dos mil años que han tomado la misma decisión que Benedicto XVI. Es algo que la iglesia avala, si el Papa no esta en condiciones de seguir puede tomar esta decisión. De hecho en la historia hubo un Papa que fue Celestino V que renunció y es un santo. No es que vaya contra Dios esta dentro de lo que la iglesia permite”.

Aprovechamos la oportunidad para preguntarle sobre estas fechas tan significativas para la religión católica con el comienzo de la cuaresma:

“Hoy comenzamos la cuaresma con el rito de las cenizas, es un rito muy significativo, porque las cenizas resultan de los olivos que se usaron el año pasado para el domingo de Ramos, esos mismos olivos se queman y se produce la ceniza, entonces lo que fue algo de gloria de recibir a Jesús triunfal en Jerusalén hoy queda reducido a un poco de cenizas, entonces eso muestra la caducidad de la vida humana, por nosotros solos somos nada, con Dios lo podemos todo, entonces la iglesia que es muy pedagógica nos invita a tener en cuenta en esta celebración y en la cuaresma, que somos criaturas de Dios y que nos va a llamar un día a su presencia, pero que estamos invitados a la vida eterna. Esto es la humildad de nuestra condición humana pero nuestra gran dignidad de hijos de Dios que es lo mas importante”.

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